No quiero decirte lo mucho que te amo
No quiero de rosas y de mieles contarte
Hoy tan solo quiero febril desnudarte
Yen tu piel de seda pasear a mis labios
Hoy quiero con furia, malicia y agravio
Morderte en el cuello hasta hacerte daño
Bajar por tu vientre peldaño a peldaño
Por darte en mi boca, de placer martirio
Que sobre tu espalda hermosa de lirio
Te coja las manos como prisionera
Y en último gesto de ruda cadera
Derrame en tu seno a mi vida entera
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